El Artista

Los ojos le brillaban. Por fin cumplía el sueño de ver esos retratos de oriente colgados en las paredes de un bar. De compartirlos.De tener un público que escuchaba con asombro sus experiencias. Estaba un poco nervioso y un poco avergonzado también. Nunca lo ví tan ancho.
Cuando terminó la muestra ,el antique se fue vaciando.Sólo quedamos unos pocos bebiendo vino y conversando.La conversación se trasladó a casa y la acompañamoscon panqueques de dulce de leche. Luego decidimos llevar a nuestros invitados okupas ( pero okupas primer mundistas) a su hogar. Fue como una película. Entramos a la base militar abandonada.Todo estaba oscuro.Soplaba el viento.No había luz.De las paredes pendían dibujos coloridos y setentistas.
La casa tenia unos ventales inmensos con vista al bosque y al mar.
Mientras nos ibamos, tropezando con ramas y otro tipo de objeto no identificados , "el artista" imaginaba la gran cantidad de fotos que reclamaba ese paisaje y que colgaría en otras paredes , de otros bares.